Uno de los tantos retos al realizar branding gastronómico es despertar el apetito a través de colores, formas, imágenes y textos.
Para Asian bowls utilizamos diferentes elementos: contraste de colores, brillo y humo en los alimentos así como textos persuasivos que inviten a probar y saborear cada bocado.
Si tu negocio pertenece a este giro ¿qué te ha funcionado? ¿qué podrías mejorar?